La Casa de África en La Habana Vieja
Por Anónimo.
Un museo para conocer y entender a un continente
Aunque para todo el mundo el descubridor de Cuba haya sido Cristóbal Colón, quien llegó a la Isla el 27 de octubre de 1492, luego de una travesía que le llevó también a apreciar a América en toda su magnitud, en realidad Cuba tuvo tres descubridores.
El segundo descubridor fue el filósofo y naturalista alemán, Alejandro de Humboldt (Alexander von Humboldt), uno de los fundadores de la geografía moderna, conocido entre los cubanos porque sus investigaciones sobre el país aumentaron los conocimientos de la geografía, las comunicaciones, la flora, la fauna, la topografía, el clima, los suelos, el cultivo de la caña y la elaboración de azúcar, entre otros aportes.
Y el tercero fue Don Fernando Ortiz, célebre antropólogo, jurista, arqueólogo y periodista cubano que también fue estudioso de las raíces histórico-culturales afrocubanas, criminólogo, etnólogo, lingüista, musicólogo, folklorista, economista, historiador y geógrafo.
La Casa de África está precisamente dedicada a este habanero, un museo hecho para reflejar elementos de la historia y las influencias del llamado continente negro en Cuba, donde se preserva el legado histórico que trajeron siglos atrás, los esclavos que llegaron a la Isla.
El centro abrió por primera vez el 6 de enero de 1986 y desde entonces le ha presentado al mundo una extensa colección etnográfica del continente africano, donde destaca la exposición de más de cuatro mil piezas, que van desde enormes figuras de manera hasta pequeñas piezas de marfil, con elementos propios de 27 naciones africanas.
El Museo Casa de África dispone de salas permanentes sobre la cultura de los pueblos del África sub-sahariana y exposiciones de elementos legítimos de la amplia variedad de religiones afrocubanas; también allí se promueven labores investigativas que hacen del lugar una importante institución de enseñanza donde investigadores, lingüistas y estudiantes acuden en busca de elementos históricos sobre los vínculos de la Mayor de las Antillas con esa región del planeta en cuanto a sus comidas, costumbres, danzas, música, lenguaje y religión.
Algunos de los objetos que se muestran, proceden de la colección del propio Fernando Ortiz, además de obsequios y donaciones dadas a Fidel Castro, en ocasión de sus numerosas visitas a distintos países de ese continente.
Es el único museo en el mundo donde el ciento por ciento de las piezas africanas que atesora, es producto de la solidaridad y el agradecimiento por la contribución de la Isla a ese continente en los últimos 50 años.
Las colecciones
Son 10 las colecciones que se muestran al público en el museo.
La de la esclavitud, donde se exponen objetos originales e imágenes del cruel proceso de la esclavitud en Cuba. La exposición la conforman la réplica de un trapiche vertical, una carreta original utilizada para la transportación de la caña de azúcar, calderos antiguos, una piedra de un viejo molino de granos, un cepo como muestra del instrumento del castigo corporal que se le aplicaba a los esclavos, látigo y grilletes utilizados por los mayorales como medios represivos, al igual que otros elementos que reflejan todo el horror vivido en aquella época.
La sala Fernando Ortiz, expone libros y objetos personales del investigador cubano, también contiene muestras de las prácticas religiosas afrocubanas como la Regla de Ocha e Ifá o Santería.
Esta es una religión nacida de la armonía entre la cultura tradicional Yoruba y la religión católica; por su parte, el Palo Monte, es otra manifestación religiosa africana que tiene su espacio dentro del museo, la misma emigró y se expandió en el continente americano y mezcla el chamanismo africano con el espiritismo, la magia y el catolicismo y además está presente la religión de los Abakuá, una sociedad secreta de origen cubano donde solo se aceptan varones.
Otra de las colecciones es la de religiosidad popular, la cual responde a las diferentes formas de religiosidad popular cubana de origen africano de acuerdo a la agrupación etno lingüística.
La colección por manifestaciones culturales y países, ubicada en la segunda planta de la casa está dedicada a representar las diferentes manifestaciones culturales del continente africano así como las formas de vida de los países de África, aquí se permite conocer su arte, artesanías, lo más característico y común de estos pueblos, sus actividades económicas, sus usos y costumbres.
En la sala que atesora la colección de tallas y marfiles se puede observar las formas en que se trabaja el marfil en África y se muestra a través de diferentes colmillos de elefantes, el procesamiento artesanal del marfil, desde su estado bruto hasta el más elaborado.
Por otro lado, la colección de máscaras enseña formas y materiales de estos objetos en modos muy diversos por la infinidad de cosas que representan.
Su nombre lo explica, la colección de textiles y vestuarios está destinada a mostrar trajes que en África son confeccionados con características muy especiales y para cumplir funciones muy específicas, como los trajes típicos africanos que constituyen una forma de identidad continental.
La música también está presente con la colección de instrumentos musicales provenientes de diferentes áreas de África. El tambor Arará es considerado la joya de la institución, por tratarse de una pieza única en la colección, creada en La Habana hace más de un siglo por un tamborero esclavo. Posee como principal particularidad una cabeza africana tallada en la parte superior.
La sala muestra otras piezas originales de la música africana como los agogó, campanillas para evocar a los santos en los cultos religiosos, la yuka o «palo largo», con la cual se escuchó en Cuba la primera música africana, además de las claves las maracas; además de que el museo cuenta con dos de los 25 ejemplares de tambores tipo Batá (un tambor de doble parche, tallado en madera con forma de reloj de arena, con un cono más largo que el otro) que se construyeron en Cuba para usos de rituales.
Por último están la colección de utensilios tejidos con fibras vegetal con muestras de cestas fabricadas de diversas variedades de estas fibras, un instrumento propio de las mujeres que se utiliza para el transporte a largas distancias de gran cantidad de mercancías; así como la colección por países africanos, la cual se encuentra en la tercera planta del museo y que representa a los Nuevos Estados Africanos que corresponden a países ordenados según su nueva división política. Esta colección consta de un mapa maqueta de África donde puede verse la distribución geográfica de los países.
La Casa de África al servicio de usted
El museo ofrece actividades culturales; visitas libres, guiadas y dirigidas; como parte del trabajo científico se promueven eventos, cursos y talleres impartidos en la propia Institución por destacados estudiosos e investigadores del tema africano o afrocubano. Entre estos eventos, el más importante es el Taller Científico de Antropología Social y Cultural Afroamericana Entre Cubanos, que se realiza anualmente para conmemorar el aniversario de la Casa de África.
Un espacio permanente y de mención obligada lo compone el Aula Taller José Luciano Franco (profesor, investigador y periodista cubano interesado en asuntos historicos sobre la trata de los esclavos y su rebelión), que funciona una vez al mes y donde eminentes estudiosos del mismo tema presentan sus trabajos investigativos.
Dentro de la casa hay también una biblioteca especializada. En el museo se dan cursos y se han creado estructuras para brindar servicio museológico incluso a descapacitados físicos.
Situada en Calle Obrapía #157 entre Mercaderes y San Ignacio, en el Centro Histórico de la Habana Vieja y dirigida por Alberto Granado Duque, la casa museo abre sus puertas martes a sábados de 10:15 de la mañana a 5:45 de la tarde. En horario nocturno se organizan visitas dirigidas y espectáculos acordados con agencias turísticas. Por su parte, los domingos trabaja de 9:15 am a 12:45 pm.
Para una mayor información puede llamar al teléfono (+537) 861-5798.
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