El museo de La Ciudad, cuña de los símbolos de La Habana
El Museo de la ciudad se encuentra en el Palacio de los Capitanes Generales que fue la sede del gobierno de La Habana durante siglos y es actualmente también sede de la Oficina del Historiador. Hoy es uno de los lugares turístico más apreciados, como también puede observarse en el video de Youtube que incluímos.
El Palacio de los Capitanes Generales
Además de ser un palacio histórico que hoy hospeda el museo con las reliquias de la ciudad, uno de los museos más importantes de Cuba, es también la obra de mayor importancia de la arquitectura Barroca en La Habana. Se encuentra en la Plaza de Armas, frente al Templete, al Hotel Santa Isabel y al Castillo de la Real Fuerza. En su patio interior se encuentra una estatua del descubridor de Cuba, Cristobal Colón.
El Palacio ocupa toda la manzana y antiguamente, en su lugar, se encontraba la antigua Parroquia de La Habana. Su construcción comenzó en el año 1776 y desde que se terminó fue sede de 65 gobernadores de Cuba. Desde 1899 hasta 1902, fue sede de los gobernadores militares de Estados Unidos y, finalmente, en la época republicana fue palacio presidencial hasta el año 1920.
Fue también cabildo y cárcel durante toda la época colonial hasta 1835, aparte de tener muchas oficinas del gobierno y de comerciantes que las arrendaban a plazo. Mientras que la planta alta con vista a la plaza de armas albergaba la capitanería general.
Después del 1920 queda destinado al Ayuntamiento de La Habana hasta que el 11 de diciembre de 1967, en época revolucionaria se convierte finalmente en lo que es ahora, el Museo de la Ciudad.
El Museo de la Ciudad
El Museo de la Ciudad cuenta con cuarenta salas de exposición permanentes que tienen por objetivo de preservar y mostrar las reliquias de la historia de Cuba, especialmente de la época colonial. Por esta misma razón, el Museo de la Ciudad se considera el museo más importante del centro histórico de La Habana. De estas salas de exposición enumeraremos aquí las más importantes.
Giraldilla
Es ahí donde se conserva la estatua original de la Giraldilla que fue arrastrada por un ciclón en 1926 desde una de las torres del ya citado Castillo de la Real Fuerza. Ahora lo que hay en el castillo es una réplica, siendo el original conservado en el Museo de la Ciudad. Par conocer más detalles acerca de la Leyenda de la Giraldilla, consulte esta página.
Heráldica
Esta sala es testimonio de los símbolos, objetos, usos y documentos de la nobleza cubana, no solamente de la época colonial, sino también y sobre todo del siglo XIX. Tal como lo relata esta sala, la nobleza cubana daba una gran importancia a la simbología heráldica.
Cocheras del Palacio
Los coches fueron una de las primeras industrias de Cuba, al par de la azucarera y el ferrocarril. Esta sala es testimonio de esta industria. Contiene una vitrina con cerraduras, llaves y soportes met'alicos de los siglos XVII, XVIII, XIX.
La cochera es casi exclusivamente dedicada a los coches de caballos que se usaron en la historia de La Habana, la gran mayoría del siglo XIX y especialmente el Quintín y el break inglés, que tenía mayor capacidad de personas.
Pero no solamente coches, también trajes de caleseros y accesorios varios relacionados con el transporte de la época. Igualmente existe una reliquia que representa la primera locomotora que circuló en Cuba en 1837 por la estación de Villanueva. Esta pieza de tipo Cagney 15, aunque haya sido fabricadas en los Estados Unidos en 1905, constituye una joya del patrimonio ferroviario cubano. Por otra parte, también los coches clásicos de Cuba que hoy son considerados una reliquia nacional, son en realidad vehículos de construcción americana.
Parroquia
La Parroquia Mayor fue la catedral inicial que se ha construido en la Plaza de Armas, la cual ocupaba el lugar que ahora ocupa el Palacio de los Capitanes Genrales. Fue destruída en 1941 por la caída de un rayo y esta sala contiene todas las reliquias y los testimonios que quedan de esta primera parroquia de La Habana. Entre las memorias expuestas figuran restos arquitectónicos de la construcción, retratos de los primeros obispos, piezas de conventos, joyas y otros objetos.
Sala del Siglo XIX
Esta sala testimonia el lujo, las tendencias artísticas, la moda, las decoraciones y los recuerdos de la sociedad cubana del siglo XIX, época de gran riqueza y bienestar en Cuba a causa del desarrollo de la industria azucarera y de la explotación de dicha industria.
Pinacoteca
Esta sala contiene una serie de obras plásticas, sobre todo del siglo XIX. Entre los artistas expuestos se cuentan Víctor Manuel, Leopoldo Romañach, Armando Menocal, Amelia Peláez, Mariano Rodríguez, René Portocarrero y otros. La mayoría siendo grandes nombres de la academia. La mayoría de estos artistas retratavan escenas de la vida cubana de aquellos tiempos.
Sala de Emilio Roig
Roig (1889-1964) fue el historiador de la Ciudad de La Habana, antes de que lo fuera Eusevio Leal. Fue promotor de varios museos y obras del centro histórico, fundó la oficina del historiador. La sala Emilio Roig conmemora el dispacho y las pertenencias profesionales de este célebre historiador, piezas de colección, incluso una caricatura realizada por Conrado Walter Massaguer que recrea a los miembros del Grupo Minorista, figuras importantes de la cultura cubana en la primera mitad del siglo XX.
Sala de los cobres
La herrería fue uno de los oficios más importantes en la historia de La Habana. Esta sala es testimonio de los objetos más ingeniosos realizados por herreros cubanos a partir de la época colonial hasta el siglo XIX.
Sala estatuaria y lapidaria
Aquí se exponen todas las obras de artes o de construcción en mármol, que se hicieron especialmente durante el siglo XIX, debido al boom del mármol en Cuba. Grandes cantidades entraban en el país, el cual era también visitado por destacados escultores italianos. Especialmente, y como hemos mencionado, se expone la Giraldilla. La mayoría de las esculturas presentes en esta sala son de mármol de Carrara, que en el siglo XIX era una materia prima que se podía encontrar fácilmente y las artes italianas se imponían a través del neoclasicismo, creando escuela y estímulos comerciales.
Finalmente la sala contiene las piezas que se fueron recogiendo de diversas avenidas, parque, jardines y monumentos y que hoy se conservan precisamente para todos los amentes de la historia.
Sala de los uniformes españoles
Todo el vestuario completo de los soldados españoles de todas las épocas, según sus grados y funciones.
Sala Capitular
El cabildo fue una forma de gobierno muy utilizada en España y la misma ha sido obviamente aplicada en las colonias, entre ellas Cuba. En esta sala se exponen elementos relativo a este gobierno y a las ceremonias relacionadas.
Cuba heróica
Esta sala es testimonio de todas las acciones anticoloniales y libertadoras llevadas a cabo por los cubanos en el curso de los siglos. Desde la liberación de las colonias hasta la abolición de la esclavitud el 10 de Octubre 1868. También están presentes elementos testimonios de las guerras de independencias de Cuba. No hay elementos de la Revolución Cubana porque para esto existe un museo aparte dedicado a este evento.
Sala de las banderas
Se exponen las banderas que se han utilizado en la historia de Cuba, desde la bandera española hasta las varias banderas que se han utilizado para Cuba. Muestra además objetos personales de los líderes independentistas, entre ellos José Martí. También se puede observar la pintura sobre la caída en combate de Antonio Maceo. Entre otros objetos y obras.
Sala del pensamiento
Contiene objetos y testimonios de las ideologías dominantes del siglo XIX. Los temas tratados son: independentismo, descontento de la burguesía esclavista con el régimen impuesto por España en Cuba, el movimiento anexista de los que sostienen el respaldo de Estados Unidos y finalmente los sostenedores de la independencia total.
Sala del Cementerio de Espada
La funeraria, como otras cosas, ha sido un arte, y la funeraria del siglo XIX está enlazada con la escultura y la fundición. Todo esto puede apreciarse en esta sala que rememora el primer cementerio de la ciudad, el Cementerio de la Espada. Contiene flores de biscuit y cuentas de cristal, lápidas bellamente talladas, ataúdes férreos y hechos históricos de la vida política acontecidos en aquel recinto. Fundada en 1806 por el ilustre Obispo Juan José Díaz de Espada y Fernández de Landa.
Esta sala es bastante grande y merece una detenida observación, contiene también el paredón de nichos y la Tumba del pintor francés Jean B. Vermay.
Sala de la Metalurgía
El cobre siempre ha sido un metal abundante en Cuba, seguido por el bronce y el hierro, por eso el trabajo de la metalurgía siempre ha encontrado un lugar adecuado para mostrarse en ese museo. Es posible encontrar una valiosa y singular colección de recipientes hispanoamericanos, datados entre los siglos XVI y XIX, legado del artista forjador catalán Ricardo Soler.
Sala de intervención de los Estados Unidos
Esta sala es testimonio de la dominación americana en Cuba. Los Estados Unidos utilizaron el pretexto de una explosión naval para intervenir, en 1898, en la guerra entre Cuba y España. Esta guerra terminó con el tratado de París, el cual consta de la entrega a los Estados Unidos del poder sobre Cuba. Esta sala contiene reliquias acerca de todos estos eventos.
Salón del Comedor
Es un salón colonial es una reproducción fiel de los comedores de los palacios coloniales del siglo XIX.
Salón del Mimbre
Refleja el ambiente que ha predominado en el palacio durante las últimas décadas del siglo XIX: muestra obras esencialmente de arte francesa y europea, especilamente el estilo Art Nouveau et Art Déco.
Trinchante
Contiene lujosas vajillas del siglo XIX, retratos realizados por el pintor americano Elias Metcalf.
Sala del café
En esta sala se recibían los capitanes generales, los cuales, en sus reuniones, compartían café. Se puede encontrar un juego de sala de perlillas del siglo XIX, piezas de arte oriental y abanicos usados por damas durante la época colonial. Ahí es posible también apreciar obras de varios pintores extranjeros.
Habitación de la Infanta
En España se solía llamar infantas a las hijas del rey. Esta sala está dedicada a la visita de la infanta Eulalia de Borbón que en 1893 visitó La Habana, albergándose en el dormitorio del Capitán general, es decir, esta habitación. Contiene objetos que recuerdan el evento y pinturas.
Sala del baño
En esta sala se exponen cristalerías, porcelanas chinas y bañeras de mármol italiano.
Sala ambientada a siglo XIX
Los ambientes aristocráticos del siglo XIX solían ser elegantísimos y era caracterizados por una mezcla de diversas influencias, incluso foráneas. Esta sala cuenta representar un ejemplo de estos ambientes.
Salón blanco
Este salón servía de complemento para recibir invitados en los días de fiestas, también se usaba como espacio para audición musical.
Salón de los Espejos
Es en este salón donde tenían lugar los acontecimientos políticos más importantes. Fue ahí donde fue firmado el tratado de París, fue donde nació la república neocolonial y donde ocurrieron otros importantes eventos.
Conclusión
Este artículo carece de fotos pero proporciona un video muy instructivo sobre todos los temas tratados y sobre muchos otros. El museo de la ciudad es muy grande y es posible que su visita requiera una mañana completa, quizás más tiempo. Las fotos no alcanzarían para mostrar todos los espacio y harían esa página muy lenta de cargar. Por eso, en lugar de las fotos, hemos preferido brindar un video.
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